«Cada vez que golpeo una pelota realmente bien, lo hago con tanta facilidad y soltura que siento cierta armonía con el universo. Es como si fuera parte de la pelota y el vuelo de esta fuera parte de mi existencia». Lee Trevino
La principal diferencia entre un buen jugador y un jugador excelente se encuentra en la capacidad de concentración que muestre cada uno de ellos. Quien sea capaz de mantenerse totalmente centrado en el juego en cada golpe, tiene muchas papeletas para el logro de una buena tarjeta.
¿Qué es la concentración? Es la capacidad mental para mantener fijos nuestros sentidos en una situación particular.
¿Cuáles son los factores que dificultan la concentración en el juego?
Existen factores distractores externos e internos. Los externos son: el público, los demás golfistas, el clima, un ruido inesperado, un pájaro, etc. Los internos son: los pensamientos de evaluación y análisis de una jugada reciente, recuerdos de otros partidos, emociones intensas tras un golpe u otra situación, pensamientos sobre asuntos ajenos al golf, agotamiento físico, etc.
Los expertos del golf nos dicen que si se pretende mantener la concentración durante los 18 hoyos, lo que equivale a 4 ó 5 horas de atención continua, el fracaso está asegurado. ¿Qué se debe hacer? La solución reside en concentrarse en pequeños objetivos, como si sólo existiera el tiro que se está por realizar y el resto del juego no existiera. Hay que hacerlo en forma intermitente, con descansos entre tiro y tiro, sin presionarse ni creando «obstáculos mentales», que no existen o no son importantes. La actitud negativa conduce a que los músculos no respondan espontáneamente, con la soltura necesaria, para crear un buen golpe.
¿Cómo podemos mejorar nuestra capacidad de concentración?
Vamos a diferenciar dos tipos de intervención para la consecución de este objetivo: fuera del partido y durante el partido.
En este post, nos centraremos en el trabajo que podemos realizar fuera del partido, para mejorar nuestra concentración. Se trata de desarrollar un estado mental óptimo estable, el cual facilitará la concentración cuando la necesitemos.
Para lograr este estado se debe hacer un trabajo encaminado al control del diálogo interno y externo, también será necesario trabajar la autorregulación emocional y aumentar la tolerancia al estrés, así como una reprogramación de la mente subconsciente grabando el estado mental que se quiere promover.
Existen métodos y ejercicios que sirven a tales objetivos. Algunos de ellos son:
– La relajación y/o meditación, centrada en la respiración. Se puede practicar cada día unos minutos, poniendo la atención del pensamiento sobre la respiración. Lo normal que pasará es la distracción, ya que acuden a la mente pensamientos diversos, cada vez que esto ocurra se trata sólo de volver a centrarse en la respiración. La práctica regular de este ejercicio no sólo mejora nuestra capacidad de atención plena y concentración, sino que nos ayuda a tener un mayor autocontrol emocional y menor estrés, ya que desarrollamos la serenidad o calma interior. Recomiendo para esta práctica la aplicación Mindfullness TS, válida para iPhone, se puede descargar gratis y es de fácil utilización.
– El aprendizaje cerebral, a través del método Neurofeedback Neuroptimal™, es un método vanguardista que facilita la mejora de las conexiones neuronales del cerebro, lo cual repercute en el desarrollo de las funciones mentales, como son la concentración y atención, y también la autorregulación emocional, así como ayuda a equilibrar el sistema nervioso central, por lo que los síntomas de estrés disminuyen o se eliminan (ver post “Entrena tu cerebro para aumentar tu tolerancia al estrés”). Para este aprendizaje es necesario acudir a un profesional (trainer de Neurofeedback) que disponga del sistema, y solicitar la realización de un programa de alto rendimiento, suelen oscilar las 20 sesiones.
– Ejercicios de inteligencia emocional, que nos permitirán, primero aprender a tomar conciencia de las propias emociones, aprendiendo a distinguir entre emociones verdaderas y falsas, así como a relacionarlas con las necesidades que estamos cubriendo o dejando al descubierto, y segundo ejercicios que nos permitan aprender a gestionar esos estados emocionales integrando razón y emoción. Se trata de alcanzar la mayor coherencia posible entre pensamiento-sentimiento-acción, ya que esto nos aportará estabilidad mental. Cada persona tiene un punto de partida diferente en su maduración emocional. Tomar conciencia de ello e iniciar un proceso de desarrollo será positivo para su vida personal y para su rendimiento deportivo. Para realizar este trabajo puede obtener el asesoramiento de un coach o entrenador mental capacitado para ello.
– Ejercicios de auto-observación del diálogo interno y externo, que facilitarán la detección de pensamientos limitadores y distractores, y así se trabajará la modificación de éstos por otros potenciadores y que ayuden a centrar la atención. Estos ejercicios pueden realizarse en forma autodidacta (hay múltiple bibliografía sobre el tema) o con la ayuda de un coach.
– Técnica de reprogramación de la mente subconsciente, para grabar el estado mental deseado, en este caso caracterizado por una buena atención y concentración y adecuada serenidad y calma, asociados al juego del pádel. Para este trabajo, se pueden emplear diferentes métodos como la PNL, o técnicas de visualización, aunque yo recomiendo el método PSYCH-K® por su eficacia y rapidez, en una sola sesión y sin necesidad de realizar fuera ningún ejercicio, se consigue grabar el nuevo estado mental. Para ello se necesita la guía de un facilitador o trainer de este método.
– Creación de un anclaje. Se trata de realizar una asociación a nivel mental, entre un gesto determinado (por ejemplo unir los tres dedos índice, pulgar y corazón) y un estado mental: en nuestro caso, la relajación y concentración. Para realizar esta asociación mental, se realizará un ejercicio de relajación profunda, que permita alcanzar el nivel de conciencia en el que predominan ondas alfa y theta, y se creará en ese estado el anclaje. Esta técnica es una de las técnicas de control mental de Método Silva®, se puede aplicar con la ayuda de un trainer de este método.
Seguiremos en otro post, con la intervención que se puede realizar dentro del partido, para mejorar concentración en el golf.